Este suculento plato está inspirado en la moussaka, pero es más sencillo de preparar. Todo se hornea en una asadera, con los diferentes elementos agregados en etapas. Hecha con yogur, queso y huevo, la cobertura corta maravillosamente la riqueza de la berenjena y el cordero, aunque carece del cuerpo de la bechamel. Si puede obtenerlos, los tomates dulces y bien maduros serían mejores que los enlatados. Esto se sirve mejor con un trozo de pita o una rebanada de pan blanco para recogerlo todo.
2 o 3 berenjenas (aproximadamente 1 1/2 libras/680 gramos), cortadas en cubos de 1 pulgada/3 centímetros
1 libra/450 gramos carne molida de cordero (picadillo de cordero)
1 cebolla mediana, cortada por la mitad y en rodajas finas
1/2 taza/15 gramos de hojas de orégano frescas, picadas
1/3 taza/80 mililitros de aceite de oliva
1/4 taza/65 gramos de pasta de tomate
6 dientes de ajo, en rodajas finas
1 cucharada de canela molida
2 cucharaditas de pimienta de Jamaica molida
1/2 cucharadita de hojuelas de pimiento rojo
sal kosher y pimienta negra
1 lata (14 onzas/400 gramos) de tomates ciruela enteros y pelados con sus jugos
3 tazas/700 mililitros de caldo de pollo
1/3 taza/20 gramos de perejil de hoja plana picado en trozos grandes
2 tazas/450 gramos de yogur griego natural
3 yemas de huevo grandes
1 1/2 cucharadas de harina para todo uso (normal)
2 dientes de ajo, picados
2 tazas ligeramente llenas/70 gramos de queso parmesano finamente rallado
1 taza/100 gramos de queso feta desmenuzado
Apenas 1/3 taza/40 gramos de piñones
2 cucharadas soperas de perejil de hoja plana picado en trozos grandes
1/4 cucharadita de hojuelas de pimiento rojo
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